La relajación más pura.

Sinceramente pienso que estos momentos son los mejores. Que cuesta mucho llegar ahí arriba, eso es obvio. Pero al llegar te sientes realmente bien, puede que en su día no lo viera así y pensara que era un agobio con la calor que hacía y demás. Pero hoy, visto desde otro punto veo que me encantaría volver a subir, subir contigo. Y desde lo más alto recordarte que eres todo para mi. Puede servir para muchas cosas, para llevar al chico del que estoy locamente pillada y sorprenderle con las vistas e intentar hacerle más feliz. También puede servir para escaparme, para esos momentos en los que estas mal y no tienes ganas de ver a nadie, es el sitio perfecto para mirar al cielo, se ve completamente todo y desde allí seguro que le vería a él, al hombre que estuvo conmigo casi 17 años de mi vida y fue para mi todo, cosa que siempre lo será. Si, esas cosas y muchas más. Por eso sé, que algún día volveré a subir, lo que no se, es con que fin.

Perdida.

Pues si, la verdad estoy bastante perdida. No entiendo porque vuelvo a escribir aquí si desde Enero que no me apetecía, supongo que ahora lo necesitaba. Aunque tampoco lo entiendo. Me compré un diario y deje de escribir porque cada vez que escribía lo que me pasaba, lo que sentía, me hacía sentirme mal. Volvía a ver muchas cosas rotas y muchos momentos que quería girarlos; quería dar la vuelta a la tortilla y verlo todo de forma positiva. Supongo que como todo el mundo, tengo mis días buenos y mis días malos. En mi caso hay más de lo segundo y juntado con una bipolaridad horrible. Esto no va dirigido a nadie ni a nada que haya pasado, solo intento desahogarme un poco para intentar volver a ser positiva en todo lo que me pasa, para seguir como ahora hacia delante y con la cabeza alta. Saber que todo tiene arreglo. Y creo que el titulo de esta entrada es como mejor me describe. En casi todos los aspectos, en casi todos estoy perdida. Menos en uno, en que te quiero.